Fábula contra el separatismo
"Había un conejo que llevaba trotando por el campo
desde hacía cientos de años. Hasta que un día llegaron las células de una pata
y dijeron: Nosotros no somos parte del conejo. Y la pata se quiso separar del
conejo. Cuando por fin lo consiguió, el conejo se quedó cojo. Pero la pata se
murió."