Su programa es una mezcla de ideas económicas propias de la "izquierda" más radical junto a ideas nacionalistas que defienden los intereses de los búlgaros y rechazan de pleno el multiculturalismo made in USA.
El Líder de Ataka ha cargado también contra el sionismo y su enorme influencia en Europa. Después de que el Parlamento rechazara en marzo crear un día para recordar a los búlgaros que murieron durante la ocupación otomana, Siderov dijo: “Y sin embargo, hay declaración tras declaración sobre el llamado Holocausto. Para los diputados que no son de Ataka, los judíos son más importantes que los búlgaros”.